19 de enero de 2019

Escritores

 Óscar Pantoja y Felipe Camargo, Rulfo. Una vida gráfica (2014)
Carles Esquembre, Lorca. Un poeta en Nueva York (2016)

Cuando, hace menos de un año, dedicamos la tertulia a dos biografías de escritores, ya pudimos destacar la proliferación de cómics de este género que han aparecido en la última década. Quizá sea el resultado de una mezcla de factores:

  • Se acepta el medio como una forma de expresión madura, capaz de contener discursos elaborados, aportar reflexiones teóricas y establecer diálogos fructíferos entre diferentes artes.
  • Se incorporan al mundo del cómic autores que proceden de otros ámbitos, como el cine y la literatura.
  • El mercado ha encontrado un nuevo público al que acercarse: los consumidores de "alta literatura" que, atraídos por la normalización de las viñetas, demandan productos con una clara legitimación cultural.

En esta ocasión, hemos seleccionado dos cómics que coinciden en su enfoque y el respetuoso uso de la documentación. Ambos se interesan por autores que convirtieron su producción artística en un reflejo de la experiencia vital, plasmando su angustia en alucinaciones y fantasmas que abrieron nuevas vías de expresión literaria.
Pantoja y Esquembre optan por replicar la estructura de las obras centrales de esos artistas, incluyendo citas y paráfrasis de los textos originales y aprovechando la potencia de las imágenes que caracterizan El llano en llamas y Poeta en Nueva York.


"Lo que busco cuando escribo una biografía en cómic de un escritor es descubrir la forma en la que él creó la obra, la relación de esa obra con su vida, el estilo particular que esa obra tiene y que es producto intrínseco con la propia vida del escritor."
(Ó. Pantoja en El Cultural)
Rulfo. Una vida gráfica defiende la idea de que el sufrimiento en la infancia, la historia y el entorno familiar determinaron el proceso de creación artística y la actitud ante las críticas negativas de uno de los principales escritores latinoamericanos del siglo XX.
La biografía de Juan Rulfo refleja la complejidad narrativa de Pedro Páramo -elipsis, alteración del orden cronológico, mezcla de puntos de vista, monólogo interior del narrador omnisciente, convivencia de líneas narrativas lineales y fragmentarias-. Tiene sentido que la elija como referencia argumental y estética, ya que ahí explora relaciones familiares marcadas por el recuerdo y la culpa en un mundo inseguro y violento. Otra cosa -y eso debe decidirlo el lector- es que sus autores hayan sabido montar el relato con la misma maestría que el original.
Como en el resto de cómics que abordan la biografía de figuras de la literatura, la crítica es unánimemente positiva. Sirve de ejemplo este elogio a su apartado gráfico, con aguadas en blanco y negro:
"Manejando el lápiz y la escala de grises, sus viñetas, opresivas y oníricas, transmiten al lector una imagen honda del mundo real, literario y visual de Juan Rulfo (...) Camargo deja que sea la faceta de fotógrafo del autor mexicano (desarrollada cuando, por motivos laborales, recorría los pueblos y paisajes de México) la que impregne sus viñetas con su desolado blanco y negro." (Fantasymundo)


"Mi Lorca es una mezcla entre las ideas que él expresa en las cartas y mis propias obsesiones, dudas, miedos… Porque esto confluye con el Lorca de aquella época, que estaba deprimido, confundido, y que libraba una lucha interna."
(C. Esquembre, Poética 2.0)
Lorca. Un poeta en Nueva York es un recorrido por esta ciudad que asombró al autor durante su estancia y un ensayo sobre cómo plasmó sus vivencias de lo que para él era tan extraño en un poemario vanguardista. La combinación imposible de elementos dispares nos permite, tras la lectura de esta obra clave de la poesía contemporánea, percibir la realidad de formas diferentes, con una mirada nueva surgida de la extrañeza.
Esquembre defiende que los poemas de Federico García Lorca están basados en las ensoñaciones provocadas por sus preocupaciones, los recuerdos y los nuevos escenarios que descubrió.

Esos versos, cargados de metáforas y sinestesias, son convertidos en dibujos que incluyen referencias a, entre otros, El rey de Harlem, Paisaje de la multitud que vomita, Navidad en el Hudson, La aurora de Nueva York o Pequeño vals vienés. También se agradecen los guiños continuos a la costumbre de Lorca de inventar palabras.

¿Qué opináis del vectorizado de los dibujos originales que utiliza el autor y que le permite reutilizar algunas imágenes?¿Creéis que resulta demasiado frío y artificial, en contraste con lo que nos quiere narrar?


3 comentarios:

  1. https://www.zendalibros.com/5-poemas-poeta-nueva-york-federico-garcia-lorca/
    Muy interesante.
    Estos poemas aparecen en el cómic de forma muy curiosa.

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